Aceptarse

 

ACEPTARSE

Aceptar lo que uno es supone un trabajo complicado para cualquier persona, debido precisamente debido a su alta permeabilidad emocional, muchas veces resulta especialmente complicado encontrar claridad en aquello que les define como individuos únicos.

Además, no debemos olvidar que, el inconsciente, es conformado entre otras cosas, también de aquellos aspectos de nuestro ser que, en cierta medida negamos o reprimimos al considerarlas negativas. Jung hará referencia al “encuentro con la sombra” aludiendo a la idea de esa necesidad de integración de nuestra parte consciente y la aceptación e incorporación de la inconsciente de la persona.

En muchos casos como hemos señalado, a pesar de su gran deseo de diferenciación, es bastante frecuente que aparezca un sentimiento de auto-crítica exacerbado que les conduce a una reprobación muy dañina de su propia naturaleza, de lo que son, de lo que desean. Un conflicto que puede terminar en confusión y malas decisiones. Por ello, un ejercicio de honestidad hacia su propio carácter, aceptando sus debilidades, defectos y fracasos y un trabajo de reconciliación profunda y aceptación de estas limitaciones, puede facilitarles el camino también a la hora de reconocer sus fortalezas, sus logros y sus talentos, ayudándoles a “ponerse en su sitio” no desde el “yo-centrismo” sino desde su enorme capacidad de aportar belleza y originalidad al mundo, trascendiendo con ello su propia auto-importancia y centrando su energía en esa meta.

“Lo que niegas te somete; lo que aceptas te transforma”

(Carl Gustav Jung)